Las calles de Jaca vivieron este domingo un auténtico viaje alrededor del mundo de la mano de los 16 grupos participantes en la 52 edición del Festival Folklórico de los Pirineos. Un multitudinario desfile puso el punto y final a cinco días de intensa actividad en la calle y en los diferentes escenarios del certamen. Se ha caracterizado por la gran afluencia de gente, llegando a quintuplicar la población jaquesa; por ello, el balance es muy positivo.
Un amplio recorrido cultural por 11 países del mundo a través de sus danzas y bailes hizo partícipes a miles de personas de sensaciones únicas durante el desfile final del Festival Folklórico de los Pirineos, que se ha celebrado en Jaca del 2 al 6 de agosto. Una cita que congregó a unas 55.000 personas en las calles de la capital jaquesa y que durante cinco días ha hecho disfrutar a vecinos y visitantes. Han participado 16 grupos de 11 países, unas 500 personas en total. Y para que todo haya salido a la perfección, ha sido imprescindible el trabajo de los casi 300 voluntarios.
Las cifras de esta edición que se acaba de cerrar igualan e incluso superan en algunas ocasiones a las registradas en 2019, cuando se celebró la 50 edición del certamen. Se han dado alrededor de 5.400 comidas en el Comedor del Festival y en los espectáculos del Palacio de Congresos y el Pabellón del Festival, la afluencia ha crecido con respecto a 2019. Para el desfile final de ayer domingo se dispusieron 3.000 sillas que, igualmente, se vendieron al completo. Las actividades de “Danzas del mundo”, para los más pequeños en el Rompeolas del Paseo, han tenido muchísimo éxito, al igual que los conciertos en el Kiosco. Y lo más importante, tal y como informa la Policía Nacional, el Festival Folklórico de los Pirineos se ha desarrollado sin que se haya registrado ningún incidente.
Durante estos días, agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Jaca, con el refuerzo del CCPA de Canfranc y la colaboración del Cuerpo de Policía Local de Jaca han estado presentes en los diversos actos, espectáculos y pasacalles, realizándose asimismo controles en los accesos a la ciudad. Este festival se ha caracterizado por una gran afluencia de gente, llegando a quintuplicarse la población y con una gran asistencia de turismo francés, que se ha sentido muy acogido por la presencia de agentes policiales de su país que han conformado patrullas mixtas con los policías españoles. También la Policía Local de Jaca ha formado parte del dispositivo de seguridad.
Por otro lado, Cruz Roja instaló un puesto médico en la parte trasera del Centro de Salud y ha estado presente con vehículos sanitarios en todos los actos y actuaciones desarrollados estos días, al igual que Protección Civil.
El alcalde de Jaca, Carlos Serrano, asegura que este Festival “ha sido un éxito rotundo de público, de asistencia, de los escenarios y de las novedades que se han incluido este año”. Por ello, “se ha recuperado la verdadera esencia de los pasacalles en plazas y calles de la ciudad, se han vendido todas las sillas del desfile final y recuperamos los números de antes de la pandemia”.
El concejal delegado del Festival, Sergio Cajal, también ha hecho hincapié en que se han superado las cifras del 2019, por ello, hace un balance “muy positivo”. Ha agradecido a voluntarios, trabajadores y técnicos municipales y a todos los implicados “el trabajo realizado estos días”. Y tras cerrar esta exitosa edición, en breve la organización se pondrá a trabajar en la edición de 2025. En este sentido, Sergio Cajal adelanta que las reuniones ya comienzan el próximo mes de octubre y continuarán en diciembre.
