Los grupos participantes en esta 52 edición del Festival Folklórico de los Pirineos han accedido al Ayuntamiento escoltados por los voluntarios y al ritmo de los palos, acompañados de la música del chiflo y el salterio. En el Salón de Ciento del esperaba la corporación municipal, encabezada por el alcalde Carlos Serrano. “Es un acto tradicional y simbólico, que supone también el colofón del Festival y donde juntamos las tradiciones, culturas y razas en ese simbolismo del intercambio de regalos”, ha dicho.
El obsequio entregado por la organización del Festival hace referencia al 400 aniversario de los Bailadores de Santa Orosia, al chiflo y al salterio, y a la flor de Edelweiss, uno de los símbolos del certamen. Por su parte, los grupos han entregado una variada muestra de artesanía, recuerdos y productos típicos de sus países.
Los asistentes han disfrutado de dos interpretaciones musicales con el chiflo y el salterio y para finalizar ha sonado el himno del Festival Folklórico de los Pirineos, aplaudido y cantado por los presentes.
Esta tarde, el multitudinario desfile de clausura, a partir de las 19.00 h. supondrá el cierre de esta 52 edición.